Espectacular aventura en Bicicleta al Cerro Catedral

Has tenido la oportunidad de ir hasta el Cerro Catedral en Bicicleta? No sabes lo que te pierdes. Desde los paisajes, el calor y los mosquitos, uno tiene mucho para aprender y descubrir en este viaje. Si aún no lo has hecho, que estás esperando? Llegó el momento para ti, como ya lo hizo para mi!!! Cicloturismo para todos!!!

Tenía en mente, desde hace mucho tiempo, hacer una bicicleteada al Cerro Catedral; pero la idea de llegar y luego regresar por el mismo camino hacía que lo vaya relegando de mi lista de prioridades. 

Sin embargo de la mano de José Pedro Domínguez de Con la Bici en la Bodega y la cortesía de Specialized Bicycles armamos una ruta para llegar al lugar; consistía en partir del Salto del Penitente, pasando por Villa Serrana, recorrer la Sierra de Carapé, llegando al Cerro Catedral; una excelente elección para disfrutar de un viaje diferente, donde tomar fotos increíbles, escuchar el silencio de la naturaleza y sintiendo el camino como si fuera tuyo.

Me habían dicho que el Cerro Catedral es el punto más alto del Uruguay, que la travesía iba a ser dura y con mucho repecho, que iba a tener mucha sed y que me compre un bidón de agua porque lo iba a necesitar. 

Viajé con mucho miedo. Al principio creí que iba a morir en el intento, que iba a ser imposible, pero me equivoqué; cuando uno tiene una meta que alcanzar y se pone a trabajar para ello, el esfuerzo da su fruto. 

Ascendiendo por las Sierras

Partimos junto con José Pedro del Salto del Penitente a las 8:00 am en nuestras bicicletas a la Sierra de Carapé, traslado que nos llevó dos horas y media. Es una parada obligatoria para tomar fotos. 

Cuando llegamos nos encontramos rodeados de cerros de piedra. Disfrutamos del canto de los pájaros y del silencio que nos rodeaba. 

No veía las horas para descansar; los repechos me dejaron las piernas duras y llenas de dolor; la única forma de aliviarlo era descansando y tomando mucha agua. Estaba temblando y durante cada parada no podíamos evitar las picaduras de mosquitos y de tábanos. 

Me sentía cansado de tanto repecho, sol radiante y tanto polvo. Sin embargo, todavía tenía mi misión vigente y me preguntaba cuanto tiempo me iba a tomar llegar al Cerro Catedral. La respuesta fue: de 3 a 4 horas a puro pedal y aguantando los repechos. 

Mientras me empobrecía de energía, me enriquecía de ganas y decidí continuar. Me levanté, tomé mucha agua y comencé a darle pedal. Si bien las subidas me mataban, las bajadas las gozaba. Sabía que cada pedaleada que no daba era como volver hacia atrás. Por eso decidí borrar mis pensamientos y centrarme en disfrutar pase lo que pase. 

Al continuar el recorrido pasaron cosas increíbles. Si quieres saber más no te pierdas mi próximo post.  

Hasta pronto!

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