Rincones de mi país (Laguna del Sauce - Maldonado)

Viajar es un sueño que te alimenta el alama y el corazón. Pero ¿qué pasa cuando no hay dinero?, los invito a reflexionar y mirar lo que hay a la vuelta de casa, llegando a la conclusión que no es necesario recorrer largas distancias para sentirse viajero.

Les voy a enseñar parte de mi tierra querida, de mi hermoso Maldonado. La Laguna del Sauce está situada en dicho departamento (Maldonado), antes de llegar a Punta del Este y rodeado de la Sierra de las Ánimas.

Tiene variados paisajes, siendo lo más destacable su vegetación, al igual que su vista al Cerro Pan de Azúcar.

Tener una embarcación acuática para recorrerla sería lo ideal, pero para los que no la tenemos, Capivaras te proporciona un recorrido increíble.

Desde Montevideo hasta el balneario La Capuera te lleva una hora el trayecto por ruta interbalnearia.

Al llegar me recibe Lucía de Lonjas de los Barrios con un delicioso café y me lleva en su auto personal hacia el punto de partida donde me encuentro con Gabriel para hacer el recorrido.

A eso de las 10 de la mañana comenzamos nuestra aventura contra viento y marea, pero con ganas de divertirnos.

Posteriormente me pasa a buscar Lucía para volver a su casa, me cambio, almuerzo y me preparo para lo siguiente.

La siguiente atracción fue el taller de Bioarte, donde me recibió Leo en su hermosa casa de barro, altamente decorada y creativa.

Leo me cuenta sobre el significado que le da a su arte, que para él es encontrarse a uno mismo en su máxima expresión y en las pequeñas cosas.

Dependiendo de lo que uno sienta en ese momento es como le sale su obra. Tuve el gusto de ser invitado a participar de un taller donde realicé un gatito blanco de barro. Para ser principiante en esta área me salió bastante bien, al menos a mí me gustó jeje.

El invierno se manifestaba a flor de piel. A medida que oscurecía más me congelaba, por eso leo me invitó con un té bien caliente, acompañado de una deliciosa miel artesanal, para poder ir preparado al siguiente evento.

Se hacía la noche y aproveché para ir a un evento comunitario lleno de bailes, coreografías y música en vivo.

Vale la pena poder decir presente y sentirte por un momento uno más del lugar, acompañado de gente que disfruta al máximo de lo que tiene y lo que hace.

Cuando llegué me dieron la bienvenida y en seguida se dieron cuenta que era visitante. Les dije que fui a recorrer la Laguna y mostraron su orgullo por el ecosistema que tienen y que protegen.

Los vecinos de La Capuera protegen una reserva de agua dulce de más de 5.500 hectáreas, rodeada de importantes residencias con jardines que la bordean junto con particulares muelles.

Al igual que la Laguna del Diario, está habilitada para deportes náuticos a remo y a vela. También es un lugar ideal para la pesca, ya que tiene una profundidad de 6 metros y medio en sus orillas y 14 metros en el centro.

Posee un color muy particular, provocado por los tonos grises y ocres de las rocas, como también la textura de los cerros, donde muchos decidieron construir sus casas, para poder apreciar las aguas del Océano Atlántico y de la propia laguna.

La Laguna se comunica con el mar vía el arroyo el Potrero, que se extiende hasta la playa entre los médanos hasta llegar a la playa Chiguagua.

Si recorres el arroyo, vas a apreciar una fauna aviar muy amplia, con patos, cigüeñas, cisnes y todo tipo de especies silvestres y autóctonas de nuestro país.

Llego a la conclusión final de que cada vez que se lo propongan, viajen. Hay muchos lugares a la vuelta de casa que los puede estar esperando con una espectacular aventura.